martes, 11 de agosto de 2009

Summer of Love


Como ya comenté en mi primer artículo sobre mi viaje a USA, en Taos están conmemorando los 40 años del rodaje de la película Easy Rider con un montaje que han llamado Summer of Love.

También dije que USA me parecía un país con muchos contrastes y que Taos había sido una ciudad con gran influencia hippy.

El caso es que ahora estoy en Santa Fe, una ciudad bastante bonita plagada de tiendas de decoración y joyerías. Cuando le pregunté a un dependiente de una librería por sitios para salir, me dijo que Santa Fe, era una ciudad que estaba pensada para gente de mediana edad que habían sido hippies que venían de compras. Es posible.

El caso es que ayer fui a desayunar a un Starbucks que hay cerca de la Plaza principal, y entablé conversación con un chaval, que me preguntó si había estado en Taos (en ese momento estaba leyendo un folleto de Taos). Le dije que sí, y luego me empezó a hablar de San Francisco, que pare él era uno de sus héroes, así como de las escrituras. Me enseñó el libro que estaba leyendo (la Biblia) y me contó un montón de cosas sobre sus creencias (ahora no me atrevo a reflejarlas por si meto la pata).

La verdad que según transcurría la conversación, me daba cuenta que el chaval parecía sacado de una comuna hippie, decía que había estado en una especie de encuentro de tribus y que llevaba casi 2 años con las mismas ropas. Me decía que para él lo más importante era la comunión entre el ser humano y la Tierra, así como que defendía el pacifismo.

También me comentó que al parecer León Tolstoi se había convertido al cristianismo al final de su etapa y me recomendó el libro The Kingdom of God is With You (en realidad, él decía The Kingdom of Gardens, pero buscándolo en la Wikipedia, creo que el título es diferente).

Algunas cosas que me dijo las he comprobado en la Wikipedia, como que León Tolstoi tuvo una influencia en Gandhi y posteriormente en Martin Luther King.

De todas formas, a mí no dejaba de sorprenderme que alguien con esas creencias estuviese tomándose un café en un Starbucks. Cuando le comenté lo que me parecía, me dijo que en realidad él consideraba que toda la tierra formaba parte del "battleground" y que él consideraba importante no alejarse de los sitios donde se movía la gente, porque así les podía transmitir sus creencias.

También me dijo que estaba escribiendo un libro relacionando los avances tecnológicos con sus creencias. Le dije que me parecía interesante y cuando me iba a despedir, me dijo que podíamos seguir en contacto por email. Yo quedé bastante alucinado de que alguien que no se cambiaba de ropa en 2 años, que decía que vivía en un autobús y que su ideal era comulgar con la naturaleza, tuviese email. Pero lo que más me llamó la atención fue que para demostrármelo, sacó un portátil de la mochila y lo arrancó para ponerse a leer el email (en realidad, creo que además del battleground estaba aprovechando que en los Starbucks tiene wifi gratuita para leer su correo, lo cual me parece perfecto).

La verdad que el encuentro me pareció muy entretenido aunque no compartiese del todo sus creencias, sobre todo, porque no me parecía una persona nada cerrada, más bien, me pareció bastante inteligente en sus planteamientos, y porque era un ejemplo más de los contrastes que planteaba en el otro artículo.

1 comentario:

Pablo Carballude dijo...

Hay gente muy peculiar por el mundo. Yo me he encontrado a un payaso profesional en Edimburgo que trabaja normalmente en Londres, aunque él es de Chicago.

El caso es que era un poco como el personaje que describes. No era hippie, pero sí estaba en esa corriente de amar a la tierra, vivir el momento, ser libre y no tener ataduras.

Le conocimos en uno de los parques de Edimburgo mientras hacía yoga y unos trucos increibles con el yoyo, pero la siguiente vez nos lo encontramos en un McDonalds jejeje.

¿Este tipo de personas también las hay en España?